Los traumatismos a nivel bucal, especialmente el traumatismo dental, se encuentran entre las primeras causas de atención sanitaria. De hecho, si sólo tenemos en cuenta las que afectan a la cabeza, la rotura parcial o total de uno o más dientes es la más frecuente.
Al contrario de lo que pueda parecer, no es una lesión leve, sobre todo cuando va acompañada de dolor o inflamación en la encía. De hecho, el éxito del tratamiento dependerá en gran medida de cómo se preserven las células del ligamento periodontal y las fibras adheridas a la raíz. Y para ello es vital acudir de manera urgente a una clínica dental o servicios de urgencia.
Cómo actuar si sufrimos un traumatismo dental
Si sufrimos un traumatismo dental, hay una serie de pautas de actuación. En primer lugar se recomienda mantener la calma, ya que con los avances que hay hoy en día es sencillo recuperar la integridad de la dentadura, y no hay por qué alarmarse. Después, hay que encontrar el diente, cogerlo por la corona (nunca por la raíz ) y, si el diente esta sucio, lavarlo durante unos segundos bajo agua corriente fría. Tras ello se recomienda reposicionarlo en boca.
Si no es posible posicionarlo por la perdida de conocimiento, nerviosismo o simplemente por la falta de confianza o conocimiento propio, debemos mantener el diente en algún medio adecuado (en un recipiente lo más aséptico posible) y acudir a la clínica dental con la mayor brevedad.