Las exodoncias o extracciones dentales conllevan procesos de recuperación generalmente incómodos, especialmente en el caso de los terceros molares -muelas del juicio-. La intervención deja un hueco en la encía que puede tardar semanas o incluso meses en cerrar. Por ello, es importante seguir al dedillo las indicaciones de tu dentista para mantener la higiene postoperatoria: ¡los cuidados después de una extracción son esenciales!
- Día de la intervención: nada más finalizar la intervención, se te dará una gasa para contener la hemorragia. Debes morderla y cambiarla a la hora si sigue sangrando: el objetivo es que la herida coagule. Durante 24 horas no podrás enjuagarte, ni escupir, ni cepillarte los dientes, ya que hay riesgo de que se reabra la herida.
- Podrás comer alimentos blandos durante las primeras 24-48 horas, siempre que estén fríos o templados. No tomes comidas ni bebidas calientes ya que podrías quemarte sin darte cuenta -debido al efecto de la anestesia-. También procura evitar morderte la encía. Estará inflamada y poco sensible a los mordiscos, y retrasaría la cicatrización.
- La higiene bucal es fundamental, pero sobre todo durante la primera semana. Debes mantener la zona limpia, cepillándote con un cepillo extra suave, con cuidado de no dañar los puntos de sutura, si es que la intervención los requiere.
- A partir de las 48/72h de la operación, aplicar agua a presión con una jeringa sobre el agujero de la muela te permitirá limpiar la cavidad de restos de comida. Es vital hacerlo, ya que su acumulación puede derivar en una infección que, además de causar incomodidad y mal aliento, retrasaría en gran medida el proceso de curación.